Exposiciones

La pintura se origina en el cuerpo. Lo invisible toma forma a través del efecto del gesto sobre el lienzo o la materia.

No obstante, una obra no es simplemente un conjunto de pensamientos, miedos, amores e intenciones de su creador - no es una transcripción. Es el contrapunto del pintor en un bucle de continua creación. La obra informa al artista y él artista a la obra desde el principio hasta el fin. Este continuo dialogo puede generar en el pintor sentimientos de desencarnación e hiper-consciencia, en los cuales le es fácil perderse. No es de extrañar que haya tantos autorretratos; un ancla "fuera del yo" y el "fuera del yo" que mantiene a flote.

La pintura es, a la vez, materia e ilusión, objeto y aire. Heidi Hahn y Bridget Mullen encuentran un denominador común en las cualidades de la pintura: translúcida, en capas, delgada, gruesa, áspera o resbaladiza. Sus figuras se forman y encuentran su lugar en la acumulación de color entre innumerables tonalidades, en las gradaciones cromáticas que desafían la condición plana de la pintura y en las capas que se superponen de manera alterna y accidental con trazos suntuosos que aplican intencionadamente.

Hahn fabrica un sistema estricto en el que el artista y la obra buscan su propia creación a través de un modo de pintura que revela el proceso de producción y la posible narrativa de la imagen recreada. Cada obra viene con un espectador integrado que es a la vez pintor e imagen plasmada.

La obra de Mullen se caracteriza por oscilar entre la polaridad de lo conocido y lo que se puede nombrar, lo hallado y lo inescrutable, representando figuras que se transforman y que cobran vida a partir de pinturas abstractas subyacentes. La artista establece un ritmo constante a través de la repetición para generar una sensación de familiaridad, sin embrago la ambigüedad de las figuras y las formas impiden el entendimiento de las mismas.

En el extraño ciclo de la pintura, el artista evoca y capta imágenes que resuenan en su interior creando un sentimiento de semejanza.

Heidi Hahn (Maestría en Bellas Artes por la Universidad de Yale en MA en 2014) es profesora de Pintura y Dibujo en Alfred University en NY y reside en Brooklyn, NY. Ha recibido varios premios, residencias y becas, entren la cuales destacan - la beca de la Fundación Jerome, la residencia de Pintura y Escultura Skowhegan en Madison, ME; y la Residencia del Centro de Bellas Artes Provincetown en MA. Su obra forma parte de la colección de la Fundación Kadist en París; y ha sido objeto de numerosas exposiciones individuales y colectivas en todo el mundo, entre las que se incluyen: el Museo de Arte Contemporáneo Nerman en Kansas City, KS (2018); Galería V1 en Copenhague, Dinamarca (2018); Anton Kern Gallery en Nueva York, NY (2018); y Premier Regard en París (2013). Su obra ha tenido amplia cobertura en numerosas publicaciones como The New York Times y Art in America.

Bridget Mullen (Maestría en Bellas Artes por Massachusetts College of Art) es una artista residente en Brooklyn, NY. Ha participado en residencias artísticas entre las que destacan MacDowell, The Jan Van Eyck Academie, la Escuela de Pintura y Escultura Skowhegan, The Fine Arts Work Center y Yaddo. Recientemente, la obra de Bridget ha sido objeto de exposiciones individuales en Helena Anrather en Nueva York, NY; Annet Gelink en Amsterdam, Países Bajos; y colectivas en Wild Palms en Düsseldorf, Alemania; DC Moore en Nueva York, NY; Thierry Goldberg en Nueva York, NY; y L21 en Mallorca, España. Su obra ha pasado a forma parte de la colección del Museo Boijmans Van Beuningen en Rotterdam, Países Bajos y el Museo Anderson de Arte Contemporáneo en Roswell, NM. Ha sido premiada por el Programa de Estudio Sharpe-Walentas en 2017-2018 con un taller y participó en la Escuela de Pintura Shandaken de 2018-2019. Su trabajo ha sido revisado en Juxtapoz, Maake Magazine y ArtMaze.